Chile Minero Chile Minero
Lo último
- Analistas de FitchSolutions BMI afirman que el mercado del litio ha entrado en una fase de estabilidad de precios, alejándose de los máximos históricos de 2022 y 2023. Este nuevo escenario ofrece desafíos y oportunidades para la industria.
El mercado del litio ha experimentado una importante transformación en el último año, entrando en un período de estabilidad de precios que los analistas de FitchSolutions BMI han denominado la “nueva normalidad”. Durante una reciente conferencia por Internet, Sabrin Chowdhury, jefe de análisis de materias primas de BMI, señaló que los precios se mantendrán bajos durante la próxima década, lo que reconfigura el panorama de la industria para los principales productores y desarrolladores junior.
Chowdhury explicó que esta estabilización se debe principalmente a una rápida expansión de la oferta mundial, que ha llevado al mercado a un superávit. “No esperamos que el litio vuelva a sus máximos anteriores. Los precios se mantendrán por debajo de 2022 y 2023 durante al menos cinco a diez años”, afirmó.
Para este año, BMI pronostica que los precios del carbonato de litio al 99,5 % en China continental promediarán US$15,500 por tonelada, aumentando a US$20,000 por tonelada en 2025. Esto contrasta con el promedio de más de US$72,000 por tonelada en 2022. De manera similar, el hidróxido de litio monohidrato (56,5 % de ley) se espera que promedie US$14,000 por tonelada este año y US$20,500 en 2025, frente a unos US$70,000 por tonelada en 2022.
Según los analistas, el hecho de que los precios del litio sigan siendo bajos podría ser una ventaja para los métodos de ahorro de costos y las fusiones y adquisiciones de la industria. Las empresas junior y los desarrolladores podrían tener que incorporar nuevas tecnologías, como la extracción directa de litio para proyectos de salmuera, mientras que los numerosos operadores de la industria probablemente se enfrentarán a una consolidación.
Amelia Haines, analista de metales y minería de BMI, indicó que de un total de 164 operaciones en su base de datos, 126 empresas individuales poseen estos proyectos. “Esto crea un entorno óptimo para fusiones y adquisiciones, con mineras más grandes y bien financiadas que buscan adquirir activos de litio prometedores para satisfacer la creciente demanda”, dijo.
Los avances tecnológicos están preparados para impactar la oferta y la demanda y son fundamentales para obtener una ventaja competitiva en el mercado. La tecnología relativamente nueva de extracción directa de litio puede reducir los tiempos de producción y el impacto ambiental en comparación con los métodos tradicionales, según Olga Savina, analista senior de metales y minería.
A pesar de la caída de los precios, muchos productores importantes siguen siendo rentables debido a su capacidad para mantener bajos costos de producción. En Australia, por ejemplo, el costo de producción de la minería de espodumena es significativamente menor para proyectos como la mina conjunta Greenbushes de Tianqi Lithium e IGO y Pilgangoora de Pilbara Minerals. Por el contrario, los productores de mayores costos como Galaxy Resources, Altura Mining y Nemaska Lithium han tenido que reducir la producción o declararse en quiebra.
La demanda de litio continúa su crecimiento, impulsada principalmente por el sector de vehículos eléctricos (EV). Sin embargo, los avances en las tecnologías de baterías, como las baterías de litio, hierro y fosfato (LFP) y los posibles avances en las baterías de estado sólido, podrían influir en las necesidades, dijeron los analistas.
Se espera que la demanda mundial de litio para vehículos eléctricos aumente alrededor de un 14% en 2024 y 2025. El sector de los vehículos eléctricos representará la mayor parte de la demanda de litio, y se prevé que las ventas mundiales de vehículos eléctricos de pasajeros alcancen los 17.6 millones de unidades en 2024, lo que representa un crecimiento interanual del 21.3%.
“Esperamos que la producción mundial de litio crezca un 16.4% año tras año en 2024 hasta 1.12 millones de toneladas equivalentes de carbonato de litio (LCE) y un 19.7% en 2025 hasta 1.35 millones de toneladas LCE”, dijo Savina.
Para 2028, se proyecta que la producción y la demanda mundial de minas de litio alcancen un equilibrio de alrededor de 1.9 millones de toneladas, y que a partir de entonces la demanda supere la oferta.
Australia y China continental serán los principales impulsores de este crecimiento. Australia, ya un productor líder de litio en roca dura, seguirá dominando debido a su sólida cartera de proyectos. China continental seguirá importando litio para su industria de baterías, al tiempo que ampliará su capacidad de producción nacional y asegurará suministros mediante el desarrollo de proyectos en el extranjero.
También se espera que actores emergentes como Argentina y Zimbabwe contribuyan significativamente al suministro global. Savina afirmó que el crecimiento de Argentina en el sector del litio parece prometedor a medida que varios proyectos importantes comienzan a operar.
Las principales economías están implementando varias medidas para lograr la resiliencia de la cadena de suministro de minerales críticos. Estas medidas tienen como objetivo reducir los riesgos externos y garantizar un suministro estable de litio para la transición a la energía verde. Haines destacó que la Ley de Reducción de la Inflación de los Estados Unidos proporciona créditos fiscales para los vehículos eléctricos que utilizan minerales críticos extraídos en el país o en mercados con acuerdos de libre comercio con los EE. UU. Esto ha estimulado importantes inversiones en proyectos de litio en América del Norte y América Latina, incluidos Argentina, Canadá y los EE. UU.
La Ley de Materias Primas Críticas de la Unión Europea tiene como objetivo desarrollar la capacidad de producción en tierra y promover la diversificación de las importaciones. Europa tiene recursos de litio en varios países, incluidos Portugal, la República Checa y Finlandia. Relocalizar la capacidad de producción y procesamiento de minerales, mejorar las capacidades de reciclaje, formar alianzas estratégicas y diversificar las cadenas de suministro son estrategias cruciales para garantizar un suministro estable de litio para la transición a la energía verde, concluyó Haines.
